Nulab, la revolución de tres sectores

Cuando desde Nulab comenzamos a trabajar en el desarrollo de nuestro dispositivo NIR portátil, quisimos enfocarnos en 3 sectores principales, aquellos que pudieran aprovechar las ventajas de nuestra pistola al máximo. Sabíamos que este desarrollo permitiría a las empresas agroalimentarias evitar ineficiencias y retrasos en el control analítico del producto, pero en concreto, este dispositivo sería especialmente eficaz determinando parámetros como la humedad en cárnicos, la vida útil de productos frescos o la cantidad de proteína y grasa en cereales.

En primer lugar y respecto al sector cárnico, (principalmente aquellas empresas que elaboran productos cocidos o curados), han detectado la necesidad de optimizar el control de parámetros como grasa, proteína, humedad o actividad del agua. Hasta ahora, la mayoría de las formas de hacerlo eran bastante invasivas, generando una alta cantidad de desperdicios.

Desde Nulab, hemos trabajado en desarrollar una solución comercializable basada en la tecnología NIR portátil miniaturizada y que a su vez, fuera fácilmente aplicable a las empresas del sector. Gracias a la inteligencia artificial, hemos sido capaces de desarrollar ese dispositivo que mide la humedad y la actividad del agua en producto cárnico curado.

Del mismo modo, estos modelos matemáticos nos dieron la posibilidad de alcanzar una mejora en la predicción de las medidas; todo ello no habría sido posible sin la participación en el proyecto de Nagrifood, Cárnicas Kiko SA, pues no solo pertenece al sector, sino que además es potencial usuario del dispositivo por lo que supimos, de primera mano, qué necesidades debíamos cubrir.

Por otro lado, nuestro foco también ha estado dirigido al sector del cereal, pues la tecnología NIR es especialmente buena analizando varios de los parámetros importantes para este producto. Algunos de estos son las proteínas, la humedad, los fenólicos o los hongos. 

Los componentes que encontramos principalmente en los granos (humedad, proteínas, etc) han reaccionado mejor a los análisis de esta nueva tecnología que a los métodos de laboratorio tradicional. Esto quiere decir que el impacto del uso de la tecnología NIR es positivo en todos los aspectos. Por ejemplo, si tenemos en cuenta el caso de los granos, en el análisis tradicional, al moler la muestra, se perdía información por lo que a la hora de investigar, los equipos prefieren la medición del núcleo completo y la información que con esto consiguen. No desperdiciamos producto y tenemos acceso a una cantidad de datos de mayor calidad y fiabilidad. 

En cuanto a nuestro tercer grupo, los vegetales, aquí nuestro dispositivo tiene un papel doblemente importante pues existe un nicho dentro de este mercado, las hortalizas para alimentación infantil, que requiere un atención más concreta a la presencia de ciertos elementos que prácticamente solo la tecnología NIR puede detectar. Estos elementos son, por ejemplo, los nitratos y nitritos.

En definitiva, tanto nuestra tecnología como nuestro dispositivo cuentan con las características necesarias para revolucionar el sector alimentario pero en concreto, los cárnicos, los vegetales y los cereales son tres sectores cuyas característica particulares conviertes a nuestra tecnología NIR, en su mejor aliado.